Quejarte solo te impide avanzar para lograr tus objetivos.
Para muchos emprendedores, el simple hecho de levantarse conlleva mucha energía. Sus cargas son incontables, impuestos, nóminas, seguros, compromisos… pero quejarte solo te impide avanzar para lograr tus objetivos. Día a día convivimos con nosotros mismos,