El éxito profesional se suele asociar a largas horas de trabajo, dedicación constante y una serie de grandes responsabilidades que terminan por ocupar todos los momentos de tu vida, con la promesa de conseguir unos objetivos ambiciosos y una carrera fructífera.
Y tampoco ayuda el hecho de que las nuevas tecnologías nos hayan convertido en profesionales localizables 24 horas al día, 365 al año.
Los clientes y proveedores envían emails un sábado por la mañana y se impacientan porque el lunes a primera hora no les hayas contestado. Los portátiles conviven con las tumbonas en verano y la apisonadora de la producción frenética y constante derrumba inmisericorde nuestros castillos de arena…
Somos personas antes que inmobiliarios, y el equilibrio entre la vida personal y el éxito profesional es esencial para la salud mental y emocional.
El trabajo puede ser una fuente de estrés y ansiedad, y dedicar tiempo a actividades personales ayuda a reducir estos sentimientos y a encontrar una sensación de bienestar. Además, la vida personal puede proporcionar un sentido de propósito y satisfacción que puede ser difícil de encontrar en el trabajo.
La gestión del tiempo, clave para un equilibrio saludable
¿Qué se puede hacer para que nuestro trabajo no se apodere de nuestra vida, nuestro tiempo libre, los momentos con nuestra familia y amigos, nuestra tranquilidad y paz mental? Sigamos con cómo equilibrar mi vida personal y el éxito profesional.
El tiempo es dinero, y el dinero necesita de un presupuesto para organizarlo de la manera más eficiente posible.
De la misma forma en que al hacer un presupuesto reservas una parte para ocio, alquiler o hipoteca, alimentos o ropa, debes tener el mismo cuidado en asignar tus horas disponibles a cultivar aficiones y estrechar lazos con personas que te importan, formarte y descansar correctamente.
Aquí tienes 5 recomendaciones si te preguntas cómo equilibrar mi vida personal y el éxito profesional.
- El primero de la lista eres tú. Los gestores financieros coinciden en el mismo consejo: no se puede esperar a ahorrar dinero a final de mes, cuando ya todo está repartido. Al contrario, debe sacarse una cantidad fija en cuanto se reciben los ingresos para que quede intacta a pesar del resto de gastos. Así pues, asígnate a principios de semana el tiempo que quieres dedicar a tu bienestar: tus clases de yoga, tu quedada de los viernes con los amigos del instituto, tu novela de misterio… Respeta el tiempo reservado a estas actividades como si fuera una visita a notaría.
- Establece metas claras para ambas áreas de tu vida. Definir metas profesionales puede ser útil para mantenerse enfocado y motivado en el trabajo, mientras que las metas personales pueden ayudar a encontrar un sentido de propósito y dirección en la vida personal. Podrás tener un mejor balance si entiendes el sentido de las cosas que haces, los plazos que tienes para conseguirlas y los mecanismos de evaluación para ver si te funcionan.
- Alterna el trabajo en remoto con la asistencia a la oficina. Aunque desde la pandemia el trabajo en casa se ha convertido en una alternativa viable y muy rentable para las agencias, plantéate alternar los días de home office con los de asistencia a oficina, para que tengas oportunidad de separar ambos mundos, además de plantear horarios estrictos no laborales para que no te veas sumergido en las obligaciones laborales cuando deberías ya estar jugando con tus hijos o viendo una peli en el sofá con tu pareja.
- Practica la desconexión digital. Al llegar del trabajo, deja el móvil en la entrada de casa y dirígete a saludar a tu familia, a hacerle cariños a tu perro… a ser persona, no trabajador. No hay nada tan importante que no pueda esperar a que te relajes cuando vuelves a casa. Utiliza funciones de respuesta automática en WhatsApp o en el correo electrónico para indicar a los posibles clientes o colegas que estarás disponible en un horario determinado. Si tienes que contestar emails un domingo porque es de vital urgencia cerrar un negocio a primera hora, prográmalos para que sean entregados el lunes, y que no se conviertan en una invitación para tener una conversación a las 11:00 de la noche.
- Aprende a delegar. Te gusta que las cosas se hagan con mimo y detalle, y sabes que como tú, no las va a hacer nadie… pero tienes que tener un plan B siempre en caso de que no puedas atenderlas. Dedica parte de tu tiempo a preparar a tu equipo para que pueda cubrir tus ausencias por enfermedad, vacaciones o simplemente si deseas tomarte la tarde libre para tus asuntos personales. Si una oficina funciona sin que tú estes, esa es una señal de éxito.
Sin buena salud no puedes conseguir tus metas
Da igual las intenciones que tengas, si estás en cama con 40 de fiebre y vomitando, no te va a ser posible asistir a esa reunión en tu oficina, por importante que sea. Todo el tiempo que dediques a cuidar de tu salud, física y mental, te lo ahorrarás más adelante.
- Haz deporte, sea el que sea. Danza, natación, caminata… aprovecha las primeras horas de la mañana o las de comida para llevar a cabo una actividad física que te mantenga en forma. Sé constante y verás no solo una mejora en tu salud física, sino un incremento en tu capacidad de concentración que te ayudará a afrontar el trabajo del día con día con más agudeza y entusiasmo.
- Come alimentos sanos, en la cantidad precisa. La tentación de terminar comiendo alimentos procesados por ahorrar tiempo de preparación cuando tenemos una vida muy ajetreada es muy grande, pero tenemos que organizarnos para tener acceso a comidas balanceadas y sanas de forma cotidiana. Cocinar una tarde para toda la semana, tener identificados los restaurantes cercanos a la oficina que ofrecen un menú equilibrado y asequible son maneras de nutrirse adecuadamente que redundarán en una mejor salud a largo plazo.
- Cuida tu salud mental. Tómate muy en serio tu salud mental y si sientes que estás agobiado, ansioso, que estás experimentando burn out, no lo dejes pasar. Dedica tiempo a la meditación, a hablar con un profesional o con un amigo comprensivo, a pasear tranquilamente y a compartir tus sentimientos con las personas que te quieren.
Y tras cómo equilibrar mi vida personal y el éxito profesional, me gustaría invitarte a que vieras la entrevista que le hice a Silvia Dolores Rodríguez García, CEO de Grupo Ficasa, para descubrir otras maneras de equilibrar nuestra vida personal y el éxito profesional. ¡Acompáñame!